lunes, 25 de febrero de 2013

La novela de mi vida.


Capítulo 1.

Desde muy temprano, tengo que levantarme de la cama al sonido de los ladridos de Kiara, mi perra; y Under Cover Of Darkness de The Strokes, la canción que puse de alarma. Tanto que me gusta y ahora empiezo a odiarla. Es una mañana muy fría, no tengo ganas de pararme pero me destapó y siento un aire fresco que me hace temblar y querer volver a acostarme. Luchó y me levanto, tengo que bañarme ó no aguantare las 6 horas de clase, son las 5.30am y no quiero acercar mi cuerpo al agua, que aunque esta tibia, siento que va helarme.
Terminó de bañarme y me doy cuenta que mi uniforme está arrugado, tengo que planchar. Pienso en el porqué no lo hice desde un día antes, recuerdo que estuve todo el fin de semana tonteando con mi novio. Desde temprano ya tengo actividades por hacer, de pronto me llega un mensaje de "Buenos días, amor" es un mensaje de él, mi novio. Y así, mi mal humor cambia por una sonrisa que me alegra toda la mañana. Bajo a desayunar, con prisa porque ya se ha hecho tarde. Todos los días tenemos que llevar a mi hermano a la Universidad, que está un poco retirado de mi casa. Juan, mi hermano el segundo de los tres, es creo el más centrado, es un muchacho muy inteligente, la verdad, lo admiro, Aunque a veces tiene mal humor, me agrada tener conversaciones con él, es demasiado maduro.
Llegó a la escuela, y tengo clase a primera hora con la profesora de matemáticas, Cecilia Pérez, es una maestra un poco exigente, pero eso hace que no me afloje. Aunque fuera de la escuela he descubierto que es una persona distinta, es la mamá de una mis amigas: Esmeralda, aunque no le gusta que la llamen así, sino Meme, es un apodo muy peculiar. Apenas me da tiempo de saludar a mis compañeros cuando inicia la clase. Después siguen dos horas de biología, con la profesora Matilde Damas, es una maestra amable, siento que espera mucho de mí, aunque puede ser idea mía. Se pasan los dos módulos de clases y al fin suena el timbre para salir al receso, siempre me emociona porque sé que Víctor vendrá a mi salón, aunque sea corto el tiempo, lo disfruto. ES TAN LINDO, me trae de desayunar, desayunamos juntos en las banquitas de mi salón, platicamos de cosas banales y no sé en qué momento se acaba el tiempo, se pasa rápido cuando estoy con él. Nos despedimos, y es obvio que nos veremos a la salida, me da un abrazo y un beso en la frente. Y vuelvo en mí, en que tengo que soportar otros cuatro largos módulos. Las horas de turismo se pasan rápido, la profesa Mirna Reyes, es de esa clase de profesores que se desvían bastante del tema, es gracioso como habla de comida, prostitución y cosas así. Nos toca inglés con la maestra Zuleika Mondragón, siempre quiere tenernos por orden de lista, qué molesto es cambiarnos de lugar, además me siento hasta atrás y no veo nada. En fin, ya se acabo la hora y todavía falta lo peor de tan pesado día, una hora más física, ¡Qué aburrido! Francamente en esas clases no hago mucho, el profesor Miguel Contreras, es un buen maestro pero no le entiendo mucho y cuando le pregunto se enoja. Ya tocaron para salir, me despido de mis amigos y me encuentro a mi novio, me lleva a mi casa y en todo el camino nos la pasamos bromeando. Saluda a mi familia y me deja en casa.

Capitulo 2.

Subo a mi habitación a cambiarme de ropa y bajar en seguida a almorzar. Me mandan a comprar un refresco, sin imaginar que algo pueda pasarme. Camino hacia la tienda que esta a unas casas de mi casa, pero se me ocurre preferir ir hasta el OXXO que está en la esquina. Veo salir corriendo a unos tipos y la gente se paraliza, no entiendo porqué. Cuando de pronto veo que uno de esos muchachos, de camisa holgada y gorra, nota que he visto su rostro y lo he reconocido. Lo veo muy nervioso y me asusto al ver que saca una pistola,  jamás había visto una en vivo, más que en las películas. Sudo frío y me quedo estática. Todo está pasando tan rápido. Se escucha un disparo muy fuerte y cerca de mí. Y es que es hacia mí, siento como algo muy duro me atraviesa la piel muy cerca de la cintura, me caigo directamente al suelo.

Capitulo 3.

Puedo observar gente desconocida alrededor de mí, a lo lejos escucho las ambulancias pero no logro distinguir.  Mis ojos se están cerrando y siento que me empiezo a helar. Siento como un “flashback” se apodera de mi mente. Recuerdo toda mi vida en un instante.

jueves, 14 de febrero de 2013